La cuantía del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) está determinada por los valores catastrales que establece la Ponencia de Valores de Bienes de Naturaleza Urbana, que fue aprobada en 2005 y cuyo periodo de vigencia concluye en 2015
En estos días, los propietarios de viviendas y demás bienes inmuebles (parcelas urbanizadas o no, naves industriales, locales comerciales, etc) recibirán en sus domicilios fiscales el recibo del Impuesto de Bienes Inmuebles correspondiente a este año, que expide el Servicio de Recaudación de la Diputación Provincial. El importe de la ‘Contribución’, que es como se conoce popularmente a este tributo, está determinado por la Ponencia de Valores de Bienes de Naturaleza Urbana del municipio, que fue aprobada por el Ayuntamiento de Yebes en 2005 y al año siguiente entró en vigor. Este documento fue elaborado y aprobado por la Dirección General del Catastro, organismo dependiente del Ministerio de Hacienda, previo informe del propio ayuntamiento.
La Ponencia de Valores vigente se redactó con la pretensión de obtener unos valores catastrales más acordes a la realidad de aquel momento, dado que la anterior revisión catastral se remontaba a casi 20 años atrás. Para el establecimiento de los valores del suelo y de la construcción se realizó un estudio de mercado inmobiliario, que incluyó la descripción de las tipologías constructivas, datos territoriales y socioeconómicos, muestras del mercado inmobiliario, valores medios, etcétera, así como la comparación de los valores catastrales resultantes con los de mercado.
Por su peculiar configuración urbanística, en Yebes se aplican tres baremos distintos de IBI. Uno para el casco histórico tradicional, otro intermedio que afecta al sector 10 del pueblo y un tercero para Valdeluz. Los valores de repercusión de cada una de estas zonas con las tasaciones vigentes de 2005 son 255 euros, 280 € y 540 euros, respectivamente. La base liquidable, que es el factor sobre el que se aplica el tipo de gravamen, se incrementará de forma progresiva y escalable año a año hasta igualarse con el valor catastral al término del periodo de vigencia de la ponencia, que concluirá en 2015.
Para atenuar el aumento de la base liquidable sobre el bolsillo de los contribuyentes, el actual Gobierno municipal ha rebajado los tipos de gravamen que, por ley, no pueden ser inferiores al 0’40%. En la actualidad, el tipo establecido es del 0’475%. La normativa prevé la revisión de la Ponencia de Valores, una posibilidad a la que el Ayuntamiento ha decidido no acogerse por responsabilidad. La razón obedece a que si se modificasen los valores catastrales establecidos en ese documento, los ingresos de Tesorería disminuirían de forma catastrófica. Al tratarse de un impuesto que no tiene contraprestación, esta pérdida de liquidez haría insostenible el mantenimiento de los servicios municipales tal y como están concebidos en estos momentos, como la limpieza viaria los parques públicos y zonas verdes, o el alumbrado público.
La estructura de gasto corriente legada a la que tenemos que hacer frente cada año es complicada de gestionar de forma sostenible. Las obligaciones generadas son de tal magnitud que una posible disminución del IBI reduciría de forma drástica los ingresos y podría quebrar las finanzas municipales en 2016.
Yebes no dispone de suelo de uso industrial y la actividad económica y comercial es aún emergente. La crisis económica general ha anulado los posibles ingresos procedentes de las plusvalías de venta de licencias de promociones inmobiliarias, lo que hace que la principal fuente de ingresos proceda de este impuesto. En el presupuesto de este ejercicio representa nada menos que el 61%, que equivale a más de 2,2 millones de euros. El actual Gobierno municipal ha compensado la disminución de ingresos derivada de la rebaja del tipo de gravamen en un 0’025% con la reducción y contención del presupuesto general del municipio en un -3% respecto al año anterior, la optimización de los recursos, la reducción selectiva de los gastos generales, el cobro de débitos procedentes de las administraciones concursales y la obtención de nuevas fuentes de ingresos a partir de los recursos administrados de Tesorería, que han supuesto una mejora sustancial en la gestión de estos caudales públicos.
El Ayuntamiento de Yebes también ha procedido a la actualización progresiva del déficit tarifario que, en materia de abastecimiento de agua, basuras y alcantarillado, acumuló la anterior Administración. Al objeto de cubrir el coste real de estos servicios, el actual equipo de Gobierno estima que han de sufragarse directamente con ayuda de las tasas y no con los impuestos que gravan las propiedades de los contribuyentes. En el último año se ha gestionado el retorno de parte de esa carga impositiva con servicios que con anterioridad no existían e inversiones que mejoran su calidad de vida, como la biblioteca municipal de Valdeluz, el incremento de las enseñanzas beneficiarias de las ayudas al estudio o el nuevo Centro de Atención a la Infancia (CAI) de titularidad municipal.
Este año la subida final del IBI será del 9%, gracias a la rebaja del tipo señalada y a que el aumento del 11% decretado últimamente por el Gobierno nacional no nos afecta dado que tenemos una de las ponencias más elevadas del país. No sucede así en otras muchas localidades de la provincia, como la ciudad de Guadalajara, donde los vecinos tendrán que asumir un incremento del 22%. En el polo opuesto se sitúa el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica de nuestro municipio, que es uno de los más bajos de la provincia.